Gracias, Pbro. Juan Piña Batista. Gracias, misionero.

Cómo empezar una comunicación, sabiendo que ya no estás. 
Cómo continuar con lo planificado, sabiendo que ya no estás. 
Cómo planificar lo necesario, sabiendo que ya no estás. 
Cómo... sabiendo...

Quién nos animará en el camino? 
Quién nos empujará en el camino? 
Quién nos coordinará en el camino? 
Quién... camino.

Tú, nos dabas el aliento necesario. 
Tú, hacías que trabajáramos unidos. 
Tú, coordinabas nuestras acciones. 
Tú...

Ayer lloramos de pena al saber de tu fin.
El último día del año y tu cuerpo descansó. 
Hoy te hemos enterrado cantando como tú querías. 
El primer día del año y, aún llorando, sabemos que serás nuestra fuerza para llevar a buen puerto la misión que comenzaste.

Gracias, jefe. 

Gracias, Juan Piña, por irte dándonos la seguridad en la Esperanza.